La cirugía de Remodelación Facial consigue realizar cambios en la estructura y perfiles de la cara, actuando principalmente sobre los huesos faciales tales como mandíbula, mentón, pómulos, arcos ciliares, maxilares y nariz, aunque en los últimos tiempos la remodelación de tejidos blandos a través de lipofilling (injertos de grasa) también ha adquirido un papel notable.
La remodelación de ciertos ángulos de la cara, prominencias o depresiones sirven para dar carácter a una cara o por el contrario para suavizarla, pero en todo caso para dar armonía entre sus partes.